lunes, 28 de marzo de 2016

El genio holandés dice adiós


El mundo del fútbol se está despidiendo a estas horas de un genio del balompié, que cambió el modelo de juego del Barcelona, un ejemplo a seguir por todos, el ídolo de los Xavi, Guardiola, Iniesta. Sí, se trata de Johan Cruyff, el genio holandés, ganador de tres Balones de Oro y otras tantas Copas de Europa con el Ajax. El gran Ajax, que asustaba en el Viejo Continente sólo por su nombre.  Y con la naranja mecánica, estuvo a punto de conseguir el Campeonato del Mundo en 1974, de no ser porque se cruzaría  en su camino la República Federal de Alemania en la final (2-1).

Su llegada al Barcelona paralizó el país, a la altura de la de Diego Armando Maradona. Con compañeros como Asensi o Rexach, consiguió ganar una Liga Española en cinco años. Todos los culés recordarán la manita que le endosaron al eterno rival, el Real Madrid, en campo de éste. O el gol antológico de espuela al Atlético de Madrid.

Su imagen llegó hasta los Estados Unidos en un "soccer" con jugadores como Beckenbahuer o Pelé. Tras su retirada como jugador, llegó su fructífera etapa como entrenador, el padre del DreamTeam y no sólo de ello, sino de un modelo de juego de toque que se empezó a mamar en La Masía desde las categorías base.

Hizo a aquel Barcelona de los Koeman, Barkero, Laudrup, Stoichkov campeón de la Copa de Europa al batir a la Sampdoria de Roberto Mancini con un mísil de falta del neerlandés. Estableció a su vez un dominio en España, con la consecución de cuatro Ligas en apenas cinco años.

Su desarrollo a cargo de la Johan Cruyff Foundation (a favor de los niños discapacitados a través del deporte) traspasó fronteras. El legado del 14, aquel joven hijo de un frutero que disfrutaba con el balón en los pies por las calles de Ámsterdam, siempre perdurará en los corazones de millones de aficionados del fútbol de los cinco continentes.


lunes, 14 de marzo de 2016

El balonmano y el tenis como protagonistas

Aprovecho estas línea para hacer una especie de homenaje a dos deportes, como son el balonmano y el tenis, en el Colegio Mayor Universitario Jaime del Amo. El primero de ellos nos ha deparado las mayores alegrías de su historia. Atrás queda ya el triplete histórico (El Corte Inglés, Marqués de la Ensenada y el Alfonso XIII) conseguido hace tres años por una generación histórica de jugadores: Sacarino, los hermanos Riezu, Etxebe, Saúl, Domingo Roca, Ayala...

Foto de archivo (www.jaimedelamo.org)
El año pasado, por su parte, no pudieron repetir la hazaña y se tuvieron que conformar con el subcampeonato de El Corte Inglés. En la presente edición, por su parte, un equipo mermado por numerosas bajas se tuvo que reconstruir de inicio y se tuvo que conformar con alcanzar los cuartos de final. En dicha ronda, le esperaba un San Pablo con sed de revancha tras el duelo del año pasado. El partido de ida deparó una ventaja de tres goles (19-22) a los 'paulinos' (término con el que se denomina a los colegiales del CMU San Pablo). En la vuelta, a pesar del esfuerzo y de que en algunas fases del partido se creyó en la remontada, el resultado fue de empate a 21 goles.

En el tenis, por su parte, el equipo dirigido por Paulo Baillo Perezagua logró hacerse con el tercer puesto del campeonato. Los Fernando Garach, Alberto Gimena y Fernando Romero consiguieron el primer trofeo para las vitrinas del Jaime del Amo este pasado sábado, tras superar al Colegio Mayor Isabel.
En el partido ante el Barberán (www.jaimedelamo.org)

A la calidad contrastada de Gimena, se le ha sumado este año el alicantino Fernando Garach, intratable con su derecha. El cordobés Romero, con una gran volea, posee una derecha potente. Tras una primera fase casi inmaculada (sólo una derrota ante el Chami), en los cuartos de final derrotaron por un ajustado 2-1 al San Agustín, gracias a la victoria en el punto de dobles.

Sin embargo, en semifinales, nada pudieron hacer ante el Guadalupe, que les derrotó claramente por un inapelable 2-0. La medalla de bronce, por su parte, supone un extraordinario éxito para la comisión de tenis, que no conseguía hacerse con un trofeo desde hace más de un lustro.

Muchas novedades en el Jaime del Amo. Un deporte como el balonmano que afronta una nueva etapa y otro como el tenis que tiene equipo para el futuro. 
Viviendo el fútbol sala desde dentro

Ayer tuve el placer de disfrutar como aficionado al fútbol sala de la final de la Copa de España de este deporte. El escenario era inmejorable, el Pabellón Multiusos de Guadalajara y el partido nos deparaba el clásico de los clásicos, entre el Inter Movistar y El Pozo Murcia. Los primeros, los favoritos a todo, llegaban a la cita con ansia de revancha, tras verse apeados en los cuartos de final de la pasada edición ante el Palma.

Los murcianos, por su parte, venían de dar la gran campanada en la ronda de semifinales, al superar contra pronóstico al Barcelona y con remontada incluida, por 5 a 3. La fiesta del fútbol sala llegaba a la bella ciudad manchega durante cuatro días. Mientras que los más pequeños disfrutaban en los aledaños del estadio de los juegos infantiles, en el interior del estadio los jugadores de ambos equipos se mordían las pocas uñas que les quedaban.

El Inter Movistar quería continuar con su espléndida racha  de victorias acumuladas durante todo el año y hacerse con otro título más de la Copa de España. La igualdad predominó en toda la primera  parte, hasta que El Pozo se encontró casi con el tiempo concluido con un gol de Bebé de doble penalti. Las faltas fueron muy predominantes a lo largo del primer periodo.

Tras la reanudación, los madrileños salieron con otra marcha y en apenas tres minutos remontaron, con goles de Ortiz y Ricardinho. El genio luso inventó otra de esas jugadas de dibujos animados, más propias de la serie japonesa "Oliver y Benji" que cualquier otra cosa. Sin embargo, la mandó al palo.
En los minutos finales, el Inter pudo sentenciar a la contra pero no encontraba el camino del gol. La tensión típica de esos partidos fue característico durante los últimos segundos, hasta que el Inter Movistar finalmente pudo levantar los brazos y levantar el título.

Carlos Ortiz se llevó el MVP del campeonato. Otra de las grandes apariciones fue la del guardameta de la 'máquina verde', Álex González. Noveno título para el Inter Movistar y octavo subcampeonato para el Pozo Murcia.